Amigos, hoy en día Haití es un ejemplo para el mundo en varios aspectos. Hay mucho que aprender en un país donde su capacidad económica y la sustentabilidad social es altamente dependiente del exterior a causa de lo que le ocurrió en tiempos de conflicto y la persecución.
En particular, el ex dictador ordenó la quema de bosques y plantaciones a fin de que los rebeldes no podrían ocultarse, por lo que la agricultura y la ganadería, hasta hoy em dia, sufrió un impacto enorme.
Cualquier cosa que puede ser producido por la economía haitiana se hace en otras partes del mundo de forma más eficiente.
Las vías de acceso son difíciles de la construcción y mantenimiento y se dañan cuando se producen a causa de las tormentas tropicales y los terremotos que son muy comunes en el Caribe.
Por la misma razón, vemos que las líneas de transmisión eléctrica de alta tensión o de baja no es factible. El derivado, el sistema telefónico y de telecomunicaciones también está restringido.
Hay que entender y aceptar que la reconstrucción de Haití requiere de dinero. La gente del extranjero permite que el dinero de sus presupuestos están empleados em esta ayuda. Debido a que hay problemas históricos, no sólo en el país, pero los organismos que prestan ayuda humanitaria, es claro que para sostener este tipo de la llegada de los recursos no sea sin las “terribles” auditorías.
Entra en escena la figura de la libre determinación y la soberania (utilizadas de manera equivocada y demagógica). El país tiene un Congreso, un poder judicial y un ejecutivo que legislar a nivel nacional y permitir o no la aplicación de leyes extranjeras en su ámbito de aplicación es su función constitucional.
También está el límite de aplicación de recursos públicos por las leyes de cada país donante. Entonces por lo que en el mediano y más largo plazo lo que queda para mantener a la reconstrucción de Haití es una iniciativa privada. Estos, a su vez, se rigen por sus accionistas antes de establecer los parámetros para la inversión de los fondos perdidos. Para ambas situaciones, las inversiones públicas o privadas uno tiene que entender y aceptar y permitir auditorías para controlar la asignación de recursos para llegar a este país.
Lo siento, profundamente, que es sólo nuestro país en el frente para el uso de esa tragedia para capitalizar en torno a las campañas electorales. Los términos de lo mandato de la ONU debe ser modificado y adaptado a las nuevas realidades como son la única garantía de que los inversores y los donantes para el uso juicioso de la ayuda financiera para los más necesitados.
Si no es esto, los inversionistas extranjeros no aceptan el riesgo y el país será entregado, en el tiempo, a sus propia suerte.
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