Estimados amigos.
Una vez más procuro advertir acerca de los fenómenos sociales que ocurren entre nuestros países hermanos.
Tenemos las dificultades naturales de las infraestructura, la geografía y la topografía que dificultan nuestra integración más amplia. Por lo tanto, debemos buscar soluciones para nuestro desarrollo que sean factibles.
La ideología es la última posición que necesitamos para complicar aún más nuestra plena integración.
La creciente insatisfacción con Morales y sutil resurgimiento de los movimientos regionales en el Perú muestran que los actuales gobernantes no logran éxito en el desarrollo de sus sociedades.
La articulación ideológica promovida por el Foro de Sao Paulo se mantera nuestros países en mora.
Vale la pena ver.
Saludos.
El ex presidente argentino Néstor Kirchner, el actual diputado por el partido peronista de la que es líder y se declaró candidato para suceder a su esposa Cristina, quien votó en el 2007, se convirtió el martes el primer secretario general de la Unión Naciones Suramericanas (UNASUR). No tiene sentido.
La organización idea propuesta por el presidente Fernando Henrique y creada en 2004 en una conferencia en el Cuzco, a través de los esfuerzos del presidente Lula pretende integrar a los países de la zona destinada a la formación de una región económica y política inspirada en la Unión Europea prometedor en sus tiempos, por supuesto.
Dos, uno, sin embargo. O que la ambición, ya que muchos se alejan de sus críticos, sólo sirve para llenar los grandes discursos que la región es rica o, como parece creer que la diplomacia brasileña, se materializará en un poder político capaz de rivalizar con la Organización de Estados Americanos (OEA ), con la ventaja. Ni que decir? no tener entre sus miembros, los Estados Unidos de América.
En el primer caso, la elección de Kirchner, por consenso, el proyecto certificar la irrelevancia de la UNASUR, la creación de que, por cierto, hasta ahora no ha sido ratificado por los Parlamentos de ocho de sus 12 países miembros, entre ellos Brasil y Argentina. De ahí la ironía de que uno escucha en Buenos Aires: "Kirchner dirigir un club que no es un socio". En el segundo caso, su elección es un contrassenso. Puede ser cualquier cosa menos un conocedor del continente ", como él elogió a Lula de Brasil.
No sólo no lo sé, y ninguno ha mostrado cada vez quieren saber. "¿No le gusta viajar al extranjero, no entienden las diferencias culturales (entre los sudamericanos) y, sobre todo, hace de la política nacional con las relaciones internacionales", señaló el analista argentino Joaquín Morales Solá, el diario La Nación, Buenos Aires. Y lo que es más, se sabe que Kirchner nunca ha apostado por UNASUR, la creación "de Brasil, según el diario. Así que nunca apareció en la conferencia inaugural del bloque, en el Cuzco, alegando que fue mal en las altas esferas. Lula respondió con sarcasmo: "Yo no corren ningún riesgo por la unidad sudamericana".
Eso no es todo. En primer lugar, está guiada por la ideología? lo que se acerca al caudillo venezolano Hugo Chávez y su discípulo ecuatoriano Rafael Correa (quizás la mayoría de la lucha de sus elecciones en UNASUR), la misma que ayuda a mantener una distancia prudente de los líderes de la organización del Perú, Alan García Colombia, Alvaro Uribe, y Chile, Sebastián Piñera. Los dos primeros, significativamente, no asistió a la reunión en la que Kirchner fue elegido. Allí, Chávez lo llamó un amigo "gran compañero de profundidad, de apoyo en todo momento y todas las dificultades."
Esta solidaridad ya ha rodado en aguas turbias. Justicia investiga un presunto plan para pagar sobornos en los negocios de empresas argentinas en Venezuela, el conocimiento que de Kirchner, como presidente, y él habría participado incluso a través de terceros. En segundo lugar, ser líder partido parlamentario y candidato a un nuevo mandato presidencial, Kirchner encarna un evidente conflicto de intereses? entre su papel en la política argentina y el papel de árbitro imparcial del cuerpo le tocó el plomo. Por último y en consecuencia, su influencia para tratar los problemas en las relaciones bilaterales en varios países de la zona es escasa.
Es muy posible, por ejemplo en su favor, que su elección podría ayudar a aliviar la crisis en las relaciones entre su país y Uruguay, que data de 2005 cuando la República Oriental instalado en la frontera con Argentina, una fábrica de celulosa considerada contaminante.Desde entonces, los manifestantes movilizados por Kirchner impedir el paso en el sitio. En los últimos dos años, bajo el presidente Tabaré Vázquez, Uruguay vetó Kirchner en la dirección de UNASUR. Su sucesor, José Mujica, levantó el veto, señalando si el "costo político" de la decisión. Para América del Sur, el resultado va a salir mucho más caro.
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